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miércoles, 27 de marzo de 2013

Los cuatro elementos: Aire




La más reciente tarea asignada consistía en seleccionar uno de los cuatro elementos clásicos: Agua, Aire, Tierra y Fuego. De esta selección nos tocaba hacer una serie de fotos con libertad artística. Decidí hacer una presentación/introducción que dice así: "Solemos vivir por años en el mismo lugar y nos volvemos indiferentes hacia aquello que lo hace hermoso. Ese lugar puede ser una habitación, un pueblo, una ciudad, todo un país. Nos convertimos en seres frios y sedentarios al absorber la negatividad de nuestro entorno. 

Es por eso que decidimos escapar con la imaginación. Soñamos con la idea de viajar, de desubicarnos. De cambiar de nombres, rostros, climas y aromas familiares por aquello desconocido que siempre promete ser mejor.

El aire es el elemento que mas relaciono con el pensamiento y con los sueños. Es aquello que no vemos pero sentimos, aquello que es vital para nuestra existencia. 

Esta serie introspectiva hace alusión a nuestros deseos de despojarnos de todo aquello que vemos como un contrapeso: La adultez, las responsabilidades, las conveniencias, las ataduras emocionales y aventurarnos a explorar nuevos entornos en busca de experiencias que nos devuelvan la mirada con la cual los niños ven el mundo."









lunes, 4 de marzo de 2013

El Escorial



Para calentar motores antes de mi viaje a La Coruña a finales de Marzo, Orlando y yo decidimos visitar El Escorial, una municipalidad al oeste del centro de Madrid. El Escorial es albergue de El Monasterio de El Escorial, una edificación antiquísima que recoge mucha historia y sirve como museo, palacio real, escuela y monasterio. Es además, donde yacen los restos de muchos de los reyes de España. Pero como no queriamos gastar mucho (17€ para entrar), decidimos mejor explorar los alrededores y el casco urbano. Fue lo mejor que hicimos. Si el interior del monasterio es una maravilla de la arquitectura, los alrededores son una maravilla de la madre naturaleza. Las montañas de la sierra cubiertas de nieve le dan un aire de imponencia al paisaje, las llanuras verdes y el cielo nublado hacen un escenario perfecto para fotografear. Espero volver, y pronto. Antes que se derrita la nieve de las montañas. Porque luego de esa sesión de fotos, me quedé con la sensación de algo incompleto.